En México, anualmente alrededor de 20 mil personas son diagnosticadas con cáncer de mama, y aunque este panorama puede ocurrir desde edades tempranas, especialistas del Centro Universitario contra el Cáncer de la UANL aseguraron que aquellas mujeres en etapa de lactancia tienen un menor porcentaje de desarrollarlo.
La oncóloga de la Universidad Autónoma de Nuevo León Jackeline Lara Campos explicó que, además de proporcionar un alimento lleno de nutrientes, la mujer que amamanta experimenta un cambio en las hormonas del cuerpo que provoca una barrera importante en el combate a las enfermedades.
La especialista del Hospital Universitario “José Eleuterio González”, mencionó que el riesgo de padecer cáncer de mama se presenta con mayor frecuencia en mujeres que superan los 50 años y factores como la genética son importantes para la elaboración de un diagnóstico.
Sin embargo, dijo que en la última década se ha registrado incidencia en personas menores a 40 años, quienes con frecuencia enfrentan este episodio por el temor que tienen de acudir a una revisión médica, aunque esto les permitiría detectarlo a tiempo.
Añadió que la autoexploración es la forma más efectiva de detectar posibles anormalidades en el seno y que este procedimiento debe realizarse de forma regular y frente a un espejo.
A la par de esta revisión, realizarse una mamografía de manera anual es lo más recomendado para descartar cualquier riesgo.
Principales síntomas del cáncer de mama
· Pequeños abultamientos
· Hinchazón constante en uno o ambos senos
· Cambios en la coloración de la piel
· Secreción por el pezón
Por último, enfatizó que el cáncer de mama puede desarrollarse de forma hereditaria. En todo caso, a diferencia de lo que se piensa, no es la mayor causa de esta enfermedad.
También recalcó que padecerlo no es sinónimo de muerte y que en la actualidad existen muchos tratamientos para combatirlo si es detectado a tiempo.
“Los casos de este tipo rondan entre 10 y 15 por ciento cuando se tienen familiares de primera o segunda línea que hayan tenido antecedentes de cáncer. En ocasiones vale la pena hacerse un estudio genético para valoración o cuando pueden ser casos esporádicos.
“Si existen dudas acerca de algún diagnóstico, es válido pedir una segunda o tercera opinión. Una paciente que tiene cáncer puede vivir muchos años, incluso puede curarse, dependiendo de la etapa en la que se encuentre. Nunca debe permitirse que personas que carecen de información den un diagnóstico terminal; siempre hay algo que hacer”.
El Centro Universitario contra el Cáncer de la UANL atiende más de 4 mil 200 consultas al año, contabilizando pacientes de primera vez y subsecuentes.
Añadir comentario